La capa de ozono que protege la Tierra va por buen camino hacia la recuperación en las próximas décadas gracias a una acción internacional concertada contra las sustancias que agotan el ozono, según un reciente estudio llevado a cabo por 300 científicos de 36 países al que hacen referencia los responsables del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en una nota de prensa divulgada a finales de la semana pasada.
Se trata de la primera vez que crece el porcentaje de ozono total en la atmósfera desde que se prohibió la comercialización de productos que emitieran CFC (compuestos clorofluorocarbonados) y otros gases de efecto invernadero con la firma del Protocolo de Montreal en 1987. Esto, sin duda, es una buena noticia.
Y es un dato positivo porque la capa de ozono, esa frágil “lámina” de la estratosfera que experimentó un acusado decrecimiento durante décadas, es la que protege a la Tierra de los dañinos rayos de Sol ultravioleta, cuyo efecto sobre el hombre es cancerígeno.
En «Scientific Assestment of Ozone Depletion: 2014» («Evaluación científica del agotamiento del ozono 2014»), se recoge que el agujero aparecido en la capa de ozono sobre la Antártida ha dejado de crecer cada año, aunque aún habrá de transcurrir una década antes de que su tamaño comience a reducirse.
El documento, coordinado por el PNUMA y la Organización Meteorológica Mundial (OMM), recoge unas declaraciones realizadas por Michel Jarraud, secretario de la OMM, en las que destaca que «la acción internacional sobre la capa de ozono es una gran historia de éxito medioambiental (…) Esto nos debería alentar a mostrar el mismo grado de urgencia y unidad para abordar el reto aún mayor del cambio climático».
Estudios anteriores habían sugerido que la capa de ozono había dejado de deteriorarse, sin embargo, «por primera vez decimos en este informe que vemos indicios de pequeños aumentos en el ozono total. Eso supone que ha comenzado una recuperación de la capa de ozono en términos de ozono total», añade el científico de la OMM Geir Braathen.
En cualquier caso, Jarraud nos recuerda que «las actividades humanas continuarán cambiando la composición de la atmósfera. Por esa razón, desde el programa Global Atmosphere Watch de la OMM continuaremos realizando el seguimiento, las investigaciones y las evaluaciones necesarias para aportar los datos científicos rigurosos necesarios para entender y en última instancia predecir los cambios ambientales, tal y como lo hemos hecho durante los últimos 25 años».
Desde el PNUMA nos recuerdan que lo que le ocurra a la capa de ozono durante el siglo XXI tendrá mucho que ver con la evolución que sigan las concentraciones de CO2, metano y óxido nitroso, los tres gases de efecto invernadero que más tiempo permanecen en la atmósfera. En general, el dióxido de carbono y el metano tienden a incrementar los niveles globales de ozono, mientras que el óxido nitroso, un subproducto de la producción de alimentos, es a la vez un poderoso gas de efecto invernadero y provoca el agotamiento del gas ozono, por lo que probable que tenga una mayor relación en el futuro con el agotamiento del ozono.
En el siguiente vídeo de la Nasa, puedes ver la evolución que ha seguido la capa de ozono entre 1979 y 2013 los días en que hubo una menor concentración de este gas protector de nuestra Tierra.
Fuente: PNUMA, Nasa.
Se trata de la primera vez que crece el porcentaje de ozono total en la atmósfera desde que se prohibió la comercialización de productos que emitieran CFC (compuestos clorofluorocarbonados) y otros gases de efecto invernadero con la firma del Protocolo de Montreal en 1987. Esto, sin duda, es una buena noticia.
Y es un dato positivo porque la capa de ozono, esa frágil “lámina” de la estratosfera que experimentó un acusado decrecimiento durante décadas, es la que protege a la Tierra de los dañinos rayos de Sol ultravioleta, cuyo efecto sobre el hombre es cancerígeno.
En «Scientific Assestment of Ozone Depletion: 2014» («Evaluación científica del agotamiento del ozono 2014»), se recoge que el agujero aparecido en la capa de ozono sobre la Antártida ha dejado de crecer cada año, aunque aún habrá de transcurrir una década antes de que su tamaño comience a reducirse.
El documento, coordinado por el PNUMA y la Organización Meteorológica Mundial (OMM), recoge unas declaraciones realizadas por Michel Jarraud, secretario de la OMM, en las que destaca que «la acción internacional sobre la capa de ozono es una gran historia de éxito medioambiental (…) Esto nos debería alentar a mostrar el mismo grado de urgencia y unidad para abordar el reto aún mayor del cambio climático».
Estudios anteriores habían sugerido que la capa de ozono había dejado de deteriorarse, sin embargo, «por primera vez decimos en este informe que vemos indicios de pequeños aumentos en el ozono total. Eso supone que ha comenzado una recuperación de la capa de ozono en términos de ozono total», añade el científico de la OMM Geir Braathen.
En cualquier caso, Jarraud nos recuerda que «las actividades humanas continuarán cambiando la composición de la atmósfera. Por esa razón, desde el programa Global Atmosphere Watch de la OMM continuaremos realizando el seguimiento, las investigaciones y las evaluaciones necesarias para aportar los datos científicos rigurosos necesarios para entender y en última instancia predecir los cambios ambientales, tal y como lo hemos hecho durante los últimos 25 años».
Desde el PNUMA nos recuerdan que lo que le ocurra a la capa de ozono durante el siglo XXI tendrá mucho que ver con la evolución que sigan las concentraciones de CO2, metano y óxido nitroso, los tres gases de efecto invernadero que más tiempo permanecen en la atmósfera. En general, el dióxido de carbono y el metano tienden a incrementar los niveles globales de ozono, mientras que el óxido nitroso, un subproducto de la producción de alimentos, es a la vez un poderoso gas de efecto invernadero y provoca el agotamiento del gas ozono, por lo que probable que tenga una mayor relación en el futuro con el agotamiento del ozono.
En el siguiente vídeo de la Nasa, puedes ver la evolución que ha seguido la capa de ozono entre 1979 y 2013 los días en que hubo una menor concentración de este gas protector de nuestra Tierra.
Fuente: PNUMA, Nasa.
Leer más: Primera vez desde la firma del Protocolo de Montreal en 1987 que la capa de ozono muestra síntomas de recuperación | Mercados de Medio Ambiente http://www.mercadosdemedioambiente.com/actualidad/primera-vez-desde-la-firma-del-protocolo-de-montreal-en-1987-que-la-capa-de-ozono-muestra-sintomas-de-recuperacion/#gdQ09SYNGvgLrUGq
Mejora tu Posicionamiento Web con http://www.intentshare.com
Primera vez desde la firma del Protocolo de Montreal en 1987 que la capa de ozono muestra síntomas de recuperación | Mercados de Medio Ambiente:
'via Blog this'
1 comentario:
En oportunidades anteriores ya nos anunciaron mejoras en la situación de la Capa de Ozono. Pareciera un problema cíclico
Publicar un comentario